viernes, 27 de enero de 2012

“Puedo” y “Paqué”.

No sé si los que dibujáis o escribís tenéis esta lucha interna o es sólo cosa mía.
Me suele suceder que hay etapas, no muy frecuentes, en que me siento muy motivada y con muchas ganas de liberar mi venilla artística. No se trata exactamente de inspiración, es más bien como si alguien, un tipo simpático y seductor me dijera que soy capaz de hacer un buen trabajo, que no importa lo difícil que sea, que saldrá bien, que dentro de mis límites, quedará resultón. Me hace disfrutar durante el proceso y cuando termino, quedo medianamente satisfecha, y él me dice: 
-¿Ves? Ya te lo dije; está fenomenal. Ahora compártelo, para que todos lo vean, esto hay que enseñarlo-.
Le hago caso, porque él sabe cómo adularme, y si recibo dos comentarios y medio alabando ese trabajo, él me hace sentir como si fuera todo un éxito, y me anima a experimentar, a probar cosas nuevas, a continuar.
A este tipo tan agradable le llamo “Puedo”, porque siempre anuncia su llegada con una especie de hechizo que me hace pensar que podría dibujar lo que me propusiera y cuando está conmigo, de alguna manera “me sale” y además lo paso estupendamente.
Pero “Puedo” tiene un viejo rival.
Es como un hermano pálido, con aspecto tristón y bastante menos atractivo. En realidad, es mucho más insistente y paciente que el volátil “Puedo”.
A veces viene cuando su hermano el guapo se echa la siesta. Se me arrima por la espalda y me abre los ojos con sus manos huesudas o me pone una enorme lupa delante que me permite ver con espantosa claridad los fallos que sólo un  día o dos antes parecían no existir.  Además,  hay ocasiones en que “Puedo” se larga sin previo aviso, dejándome a solas con él  una temporada.
Lo llamo “Paqué”, porque cuando me ve coger el lápiz me susurra: -¿”Pa” qué pierdes el tiempo con eso?. ¿”Pa” qué dibujas y lo compartes habiendo tanta gente que te da mil vueltas? ¿Qué aporta?. ¡Menudos fallos de principiante!. Mira: esto está fatal. No te va a salir, no eres capaz de dibujar nada decente... Sólo dos comentarios y un favorito... ¡Normal, y es más de lo que merece!...-
"Paqué" se alimenta de mis inseguridades, así que, en mi caso, se pone las botas. No sé cómo está tan flacucho.
Si no ha logrado salirse con la suya y hacer que deje de dibujar para siempre es porque en realidad, lo hago más por una especie de necesidad, de liberación, que por un afán de llegar lejos con ello o de sorprender a los demás. Creo que sólo tuve esas aspiraciones muy de niña, cuando soñaba que llegaría a vivir del arte.
***
Me gustaría ser capaz de controlar a estos dos en lugar de permitir que jueguen conmigo, encontrar el equilibrio. Que “Puedo” me siguiera animando, pero que “Paqué” no dejara nunca de abrirme los ojos para que su hermano no me los tape con una venda de adulaciones.
Y es que "Paqué" es un petardo, pero también le tengo cariño, ya que,  curiosamente, cuando se ceba conmigo y dejo de dibujar durante meses por su culpa, descubro, que,  a la vuelta de “Puedo”,  me siento renovada,  la pausa me ha "reiniciado" y los resultados son algo mejores...

2 comentarios:

  1. A mi ultimamente el paqué tiene ganada la batalla...Pero si que es verdad que cuando llevas un tiempo sin dibujar y te pones con ello, empiezas más renovada y con más ilusión =) Me ha gustado mucho la entrada jejeje Estaré atenta a más novedades de por aquí! *_* jejeje

    ¡Saludetes guapetóna!

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  2. Gracias. Me alegra saber que hay más gente viviendo lo mismo. Hacía UN AÑO que no actualizaba...A ver si remedio eso.

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